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Por naturaleza el hombre es competitivo y procura siempre ganar, sin importar la arena donde se realice la competencia. Curiosamente no vemos ese espíritu con relación a la paternidad. No estoy hablando de buenos o malos padres; sino más bien ese deseo ferviente y búsqueda constante para convertirse cada día en un mejor padre, y establecer un legado que a su vez transforme a los hijos en seres humanos plenos como el resultado de la influencia de un hombre que asumió su rol con excelencia. La relación con nuestras esposas es un buen instrumento para ir perfeccionándonos en la carrera antes descrita. Podemos ver como el manejo de los conflictos que se presentan en la relación servirá como el modelo más efectivo para ir forjando el carácter de nuestros hijos.

¡Papá acércate a tú bebé!

Corona de los viejos son los nietos, y la honra de los hijos, sus padres. Proverbios 17:6

Otro de los beneficios que la relación de pareja aporta a la crianza de los hijos desde la perspectiva del padre, es que por lo general la mujer ayuda al desarrollo de la sensibilidad y la paciencia de este hombre para escuchar e identificarse cada vez más con respecto a las necesidades afectivas o de otra índole que se presente en la vida de ellos. Por último el hecho de que como pareja procuremos establecer una atmósfera saludable en el hogar en todos los sentidos, nos desafía a que cada día procuremos identificar cualquier amenaza a la estabilidad familiar y empeñarnos a ser verdaderos proveedores, no solo en el ámbito financiero, sino mas importante aun en el espiritual y emocional; siendo los hijos grandemente beneficiados para que con lo recibido poder afectar positivamente las generaciones siguientes.

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El amor de pareja es la base del amor de padres

Miro hacia atrás y puedo concluir que cuando el hombre decide ser mejor esposo, se convierte a su vez, de forma proporcional, en un mejor padre. (Muchos hombres proclaman cada uno su propia bondad, pero hombre de verdad, ¿quién lo hallará? Proverbios 20:6)

Por: Javier Valdez
Pastor, Consejero de pareja.

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